Luego del fuerte incendio que el jueves pasado arrasó con el precario asentamiento “Villa Cartón” ubicado debajo de la autopista Campora, el sábado el ministro de Seguridad porteño, Diego Gorgal, afirmó que “de acuerdo con las pericias técnicas que se desarrollaron en ese lugar” el siniestro había sido intencional.

Aunque sostuvo que faltan elementos para decir si el móvil del hecho fue político o se trató de un enfrentamiento con los vecinos.

El funcionario explicó que "no hubo un accidente que generó el incendio en el lugar, sino que deliberadamente hubo alguien que generó el fuego que incendió a casi todo el núcleo habitacional".

Gorgal agregó que "no se puede saber aún que metodología se usó para provocar el incendio” y al ser consultado sobre si algún vecino de los monoblock que están frente al asentamiento pudo haber provocado el fuego, acotó que "eso no pudo ser corroborado".

En cuanto a un móvil político, dijo que "tendería a pensar que no lo hay, no obstante no descartamos desde el Gobierno de la Ciudad ninguna hipótesis". Insistió en que "hoy no tenemos nada objetivo" para "decir si hubo un móvil político o en realidad una disputa de las personas de los monoblock con los del núcleo habitacional u otra cosa".

Como puede apreciarse el Gobierno de la Ciudad no ha sabido encontrar una pista firme aunque las conjeturas, a esta altura, son muchísimas.

En tanto, 400 personas pasaron la noche en lo que quedó de la villa ubicada debajo de la autopista 7. Otros aceptaron un subsidio de alojamiento y un grupo de madres con sus hijos fueron a centros de evacuados.

El sábado por la tarde hubo varios cruces entre vecinos de zonas aledañas que se quejan por la irregularidad e ilegalidad de la “Villa El Cartón”, construida en la más en la marginalidad y la desesperación.

La ministra de Derechos Humanos y Sociales de la ciudad de Buenos Aires, Gabriela Cerruti, dijo que entre las personas que se quedaron en el lugar hay "un grupo un poco intransigente" en aceptar retirarse del predio y señaló que se inició "un diálogo para la construcción de viviendas transitorias.

Cerruti precisó que en el predio incendiado se van a construir "1.200 viviendas, algunas de las cuales serán para la gente que resultó afectada ayer". Agregó que "hay tres complejos habitacionales que se están construyendo en la Capital Federal que van a estar terminados alrededor de mayo, a las que también irá un grupo de habitantes de este asentamiento".

Está mañana se iniciaron las obras para construir viviendas destinadas a las 465 familias que residían en la villa. Según informó el ministro de Obras Públicas, Jun Pablo Schiavi, al matutino Clarín: "Primero tenemos que nivelar el suelo del predio de Cruz y Varela, y luego empezaremos a edificar. En una primera etapa haremos 300 viviendas de dos plantas para los damnificados del incendio, y se las entregaremos en 110 a 130 días. Luego haremos otras 600, de tres o cuatro plantas, para los vecinos del Barrio Soldati".

Como las 300 viviendas no alcanzan para cubrir el déficit de las 465 familias afectadas por el fuego, la Ciudad les entregará también 140 casas que está construyendo en otro lugar.

Sin embargo, la demanda de sectores populares por un lugar digno para vivir supera largamente ese número de viviendas en construcción. No obstante, desde el Gobierno de la Ciudad se niegan a reconocer la crisis habitacional que afecta a miles de familias.

Durante todo el año pasado, fueron recurrentes los reclamos y las movilizaciones para la construcción de más viviendas para aquellos que viven en condiciones infrahumanas. El gobierno de Joge Telerman hizo oídos sordos y prefirió edificar un complejo deportivo de tenis en el Parque Roca, frente a una villa miseria.

Fuentes: Agencia Rodolfo Walsh / Clarín