Grindetti presentó el Proyecto de Presupuesto para 2011

El Gobierno porteño presentó hoy en la Legislatura su Proyecto de Presupuesto 2011, que incluye un aumento del impuesto al Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) de "un promedio del 22 por ciento" porque "la inflación se ha instalado entre nosotros".
 

Grindetti presentó el Proyecto de Presupuesto para 2011

El ministro de Hacienda de la Ciudad de Buenos Aires, Néstor Grindetti, presentó el proyecto de ley de Presupuesto para el 2011 ante la comisión de Presupuesto de la Legislatura.  La proyección de recursos y gastos para el próximo período asciende a más de 25.400 millones de pesos de pesos; según el funcionario, de todo ese dinero se destinaría 6.746 millones a Educación, 4.982 millones a Salud y 1.252 millones a Desarrollo Social, entre otros fines.

La iniciativa fue calificada por el ministro Grindetti, como "equilibrada", pero "enmarcada en premisas macroeconómicas de altísima volatilidad" por "las incertidumbres que emanan del ámbito político nacional y un contexto internacional que no termina de comprender algunas conductas institucionales del gobierno federal".

Al presentar el esquema, el funcionario señaló que "hemos decidido elaborarlo con la proyección de inflación y crecimiento económico que el Gobierno nacional ha considerado en su presupuesto".
Grindetti también adelantó los lineamientos fundamentales de la acción de Gobierno previstos para el próximo año, sostuvo que mantendrán “políticas prudentes en cuanto al volumen del gasto privilegiando el gasto social – el cual insume un 66% del total proyectado- y la inversión en infraestructura que habrá de llegar a valores récord en términos absolutos y relativos”.

Luego detalló que “el proyecto de ley se fundamenta en los siguientes ejes estratégicos de gestión: Desarrollo Social, Salud, Educación, Seguridad y Movilidad”, y agregó que “por eso proyectamos un fuerte aumento en la inversión en infraestructura escolar, mantenimiento hospitalario, prevención contra las inundaciones, ampliación de la red de subterráneos y mejoras en el transporte y la infraestructura vial”.

Antes de anunciar el incremento por ABL, Grindetti explicó que "los ingresos tributarios de la Ciudad provienen de dos fuentes: la recaudación impositiva y los fondos coparticipados del Estado federal". "En 2009, la Ciudad recibió en concepto de coparticipación federal 478 pesos por habitante, el menor monto de las 24 jurisdicciones”, precisó.

Además, denunció una "discriminación" porque "en tres años de gestión, y a pesar que la Ciudad aporta el 23 por ciento de lo recaudado, el Gobierno central jamás giró aportes del Tesoro nacional. Frente a esta situación, esta gestión priorizó los esfuerzos por incrementar la recaudación propia".

Según el ministro, "la Ciudad de Buenos Aires es autosuficiente en términos financieros, no siendo en absoluto dependiente del Gobierno nacional", y aseguró que se podrá "mantener la Ciudad con sus finanzas sanas", a pesar de que "la inflación se ha instalado entre nosotros".

En ese sentido, anunció que se prevé recaudar "300 millones de pesos" extra mediante "la aplicación de un coeficiente de ajuste" del ABL, "sólo aplicable a aquellas propiedades cuyas variaciones fiscales han quedado por debajo del 30 por ciento en relación con el valor inmobiliario de referencia".  Este "ajuste inflacionario”, como lo definió el ministro implica un 22 por ciento de indexación promedio.

Tras la exposición del ministro, la oposición se hizo sentir.  María José Lubertino, del Encuentro Popular para la Victoria, evaluó que la iniciativa plantea "una tendencia que consolida el modelo inequitativo en la distribución de la riqueza y los ingresos", y consideró "indiscriminado" el aumento del ABL.

“Desde el bloque Peronista decidimos que no vamos a acompañar el aumento de ABL”, manifestó Diego Kravetz, quien argumentó que la decisión se debe a “nuestra postura de que la reforma tributaria de nuestra Ciudad debe ser integral y no mediante parches”. También agregó: “No podemos concebir que intenten realizar un aumento generalizado y no hagan un estudio pormenorizado ya que el ABL tiene la característica de ser el único impuesto que se puede medir casa por casa”.

Por su parte, Marcelo Parrilli, de Nueva Izquierda, manifestó su oposición a la modalidad de aumento del ABL: “Mauricio Macri pretende subir el ABL en forma indiscriminada, en vez de diferenciar por inmueble, no incluye ningún aumento salarial para los docentes y demás trabajadores, y tira 1.500 millones de pesos al negocio de la basura, que es el contrato privado más caro de la Ciudad”.