Separar, reciclar, incluir

Recolectan y seleccionan residuos secos en galpones, talles y consorcios de La Boca y Barracas. Podrían triplicar sus trabajadores pero necesitan que el Gobierno porteño les provea los recursos establecidos por convenio. También apuntan a que más vecinos se sumen a la separación. Carla Perelló.

Separar, reciclar, incluir

La cooperativa de cartoneros El Trébol es oriunda del bajo Flores, pero cuando tuvo la oportunidad miró hacia el sur. Eligieron La Boca y Barracas y allí comenzaron a trabajar el 2 de enero de 2012. Como su nombre lo indica, recuperan materiales para reciclar, sin embargo, su accionar no se agota allí: “También recuperamos gente, porque esto se transformó en un oficio que además le sirve a la sociedad”, dice y sonríe Roberto Pontarollo, de la Comisión Directiva.

El reconocimiento como cooperativa lo tienen desde 2006. Pero su historia comenzó mucho antes. “Tenemos hasta tres generaciones”, dice Roberto y se siente cómo se le infla el pecho. En ese camino, quienes trabajaban de manera independiente pasaron a formar parte de un conjunto, a tener un trabajo estable, a insertarse en el sistema laboral formal. Eso significó tomar conciencia y rebuscárselas para “salir de la opresión”. El cartonero independiente “no puede elegir, entonces termina siendo explotado”, explican ahora que sí eligen.
 
Se reconocen como actores sociales y la tienen clara: “Queremos optimizar todos los recursos del Estado porque tenemos la capacidad para eso. Queremos aprovecharlo”. La cantidad de personas con las que cuentan es muestra de ello. Hay 48 personas activas en la cooperativa; pronto serán 52 y tienen en espera unas 150. “Es el cálculo que hicimos. Necesitamos esa cantidad para llegar a recolectar 35 toneladas diarias –además de más camiones–. Hoy hacemos 50 en un mes”, indica Roberto. Sus limitaciones no son por falta de personal sino de recursos que el Gobierno porteño debería proveerles según el acuerdo firmado a principios de 2013.
 
Por ejemplo, cada cooperativa debería contar con un centro verde dentro de la Ciudad para poder operar. No es este el caso: El Trébol alquila un galpón en Lanús, al sur del Gran Buenos Aires. Allí recuperan los materiales a reciclar y los venden, hacen muchos más kilómetros y pierden eficacia.
 
Pese a eso, en La Boca y Barracas cuentan con 130 generadores industriales donde retiran la basura ya separada en origen, entre ellos galpones, talleres mecánicos, de chapa y pintura y 16 consorcios. Todo actúan según la ley de Basura Cero que obliga a identificar residuos secos y húmedos. Hasta tienen un próximo punto: Catalinas Sur.
 
También trabajan de manera particular, puerta a puerta. “Hay algunos que tienen clientes desde hace 20 años, que los llaman hasta para saludarlos por el cumpleaños”, asegura Roberto. Ese camino seguirá en la Plaza Colombia, en Brandsen y Montes de Oca, donde el 16 de julio instalarán un punto verde. De miércoles a sábado entre las 11 a 19 responderán dudas y recibirán materiales para reciclar.
 
En contacto
Cooperativa El Trébol: info@trebolcoop.com.ar