Crece el número de personas que viven en la calle en la Ciudad

Frente a lo evidente, el gobierno porteño admitió que aumentó un 23 % la cantidad de personas en situación de calle. La presidenta de la Auditoría General de la Ciudad, Cecilia Segura, reconoció que para el organismo “el número es mucho mayor” y que no existen políticas coordinadas para dar soluciones. 

 
Crece el número de personas que viven en la calle en la Ciudad

El subsecretario de Fortalecimiento porteño, Maximiliano Corach, debió admitir que la población de personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires aumentó, en el último año, de 866 a 1066. El reconocimiento no llegó acompañado de nuevas políticas para afrontar la problemática. Corach aseguró que la mejor manera de ayudar es llamar a la línea 108, del programa Buenos Aires Presente (BAP). Distintas organizaciones sociales criticaron el número reconocido por el oficialismo.

“Nosotros nos reunimos con la autoridades porteñas que están a cargo de este tema hace unos días y ellos reconocieron el aumento del 23% de personas en situación de calle, aunque para nosotros ese número es mucho mayor. La política económica del macrismo ha producido un aumento de la gente en situación de calle, y la ciudad de Buenos Aires, que es la más rica del país, no tiene políticas coordinadas para dar una solución integral. Lo único que ofrece son paliativos que no resuelven nada”, explicó Segura.

“Como no hay política habitacional que atienda las necesidades de las personas que están en la calle o de las que están en riesgo serio de quedar en la calle, no hay ninguna posibilidad de acceder a una solución definitiva. Entonces, las personas quedan en dispositivos que son transitorios, pero que se vuelven permanentes.”
 
Finalmente, se refirió a la situación de los paradores que el gobierno porteño dispone para la atención de las personas en situación de calle: “Los paradores no se adecuan a las necesidades de las personas que están en situación de calle. Entonces, las familias no quieren ir a esos lugares, porque tienen que separarse (solo una parador propio en toda la ciudad admite familias) o porque no pueden guardar sus herramientas de trabajo, o sus carros. Nadie quiere vivir en la calle, pero para muchas personas los paradores no son una opción. Y esto es grave”.
 
Por otro lado, Segura se refirió al Operativo Frío. “En los tres polideportivos de la ciudad que se incorporan durante este operativo las personas solo pueden pasar la noche. Pensemos en una familia con chicos que en las vacaciones de invierno no van a la escuela y que entonces, con este frío, están todo el día en la calle.”