Los grandes cuentan el barrio

En el Centro Cultural Enrique Pavón Pereyra, veinte abuelos relatan historias sobre el Barracas de sus recuerdos. Puentes, plazas, bares o el origen del nombre de alguna calle, son los disparadores del taller organizado por la Defensoría del Pueblo porteña. Por Silvia Vepstas

Los grandes cuentan el barrio

“Si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia, la verdadera historia”, escribió Litto Nebbia en una canción de 1984. Sin duda, una frase controversial que invita no necesariamente a dudar del relato establecido, de la historia oficial; pero sí, por lo menos, a pensar que también hay otras historias aún no contadas. Con este espíritu de descubrir “nuevas perlitas”, de sacar a la luz historias de vida, experiencias cercanas, vivencias marcadas a fuego que, hasta ahora, solo se contaban en el ambiente familiar o en una charla “con los muchachos del café”, es que la historiadora y escritora Alicia Korecky lleva adelante el taller de historia oral “Los grandes cuentan la historia”. Allí se reúnen semanalmente veinte abuelos de Barracas a contar, de primera mano, cómo fue que, para ellos, pasaron las cosas.

 
Se trata de una iniciativa de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires que organiza estos talleres en distintos barrios y, este año, desembarcó en el Centro Cultural Enrique Pavón Pereyra, en California 2587. La promesa es continuar en 2018 ya que son tantas las historias vividas que –dicen- “todavía queda tela por cortar”. Es más, la riqueza de los relatos, los impulsó a escribir el libro “Así era mi barrio”, que piensan editar a fines del año próximo, y que recoge imágenes solo vistas por sus ojos y experiencias que, una vez leídas, permitirán entender cómo los vecinos más históricos de Barracas han vivido los cambios sociales, culturales y políticos de este último siglo. Y testigos no faltarán, ya que si bien el taller es abierto a toda la comunidad, varios de sus integrantes tienen entre 75 y 91 años y cuentan, no solo con la vivencia y la memoria, sino también con una lucidez y un entusiasmo que pueden despertar la sana envidia de cualquier escritor novato.
 
Durante todo este año, cada mañana de martes, entre mates o compartiendo un guisito carrero, este grupo de vecinos se reunió para “contar la posta” y Sur Capitalino pudo compartir con ellos una de esas jornadas. La veracidad de una fecha, el nombre original de una calle, el color primario de un  monumento removido de una plaza y que nadie sabe donde fue a parar, la verdad sobre una resonada historia de amor local, el impacto que el cierre de las barracas le produjo al barrio, la inseguridad de antes comparada con la de ahora, los carnavales, las huelgas, los potreros o la pregunta de esta cronista acerca de si el pasado de Barracas fue mejor que el presente, generan acaloradas pero divertidas discusiones que, por momentos, ponen a la historiadora Korecky como al frente de una clase de adolescentes.
 
Como para entender cómo llegó Barracas a ser lo que es hoy, el taller de historia oral comienza  a contar la historia desde 1790 y, pasando por la construcción del Puente Gálvez o la marcha de las escobas sobre la Avenida Brown, en 1907, llega hasta nuestros días enriquecida por las vivencias de los últimos ochenta años de los abuelos que concurren al taller, ya que el objetivo es rescatar y preservar la memoria colectiva y lograr que los vecinos sean los verdaderos protagonistas. En cada encuentro, Korecky presenta un tema disparador que puede ser los puentes, las plazas, los bares o el origen del nombre de alguna calle, y los talleristas cuentan las historias que conocen sobre ese tema y sus experiencias personales. También escuchan tangos referidos al barrio y analizan su letra. Y así, entre mates, libros, música, debates esclarecedores, recuerdos emocionantes y anécdotas increíbles; los borradores escritos en papel se van juntando para dejar testimonio, en un libro, para la posteridad.
 
CÓMO CONECTARSE
El Centro Cultural Pavón Pereyra está ubicado en California 2587, en Barracas, y lo preside Julio Marsano. Allí también funciona el Centro de Jubilados. Cuentan con variadas actividades, gratuitas y aranceladas, durante toda la semana. Para informarse y participar se puede llamar al 4302-2969.