La otra cara del desabastecimiento

El legislador porteño, Gonzalo Ruanova, denunció al Gobierno porteño por el vencimiento de  medicamentos e insumos hospitalarios por cinco millones de pesos en un galpón de la empresa que debía distribuirlos en los centros de salud de la Ciudad.
 

La otra cara del desabastecimiento

Luego de la denuncia del legislador de Nuevo Encuentro, el subsecretario de Salud de la Ciudad, Rodolfo Kirby, reconoció la existencia de los medicamentos vencidos, "sí hay productos vencidos. Vienen de entregas desde hace mucho tiempo. Nosotros estamos tratando de ordenar el tema".

“El 23 de noviembre de 2009, la Defensoría del Pueblo hizo un informe donde hay 60 casos de pacientes insulino dependientes que cuando fueron a los hospitales públicos les dijeron que no había insulina, eso sólo en el 2009 y son sólo los pacientes que llegaron a la Defensoría", explicó Ruanova.

A raíz de estas denuncias, se elevaron dos pedidos de informes sobre la compra y distribución de medicamentos en la Ciudad y se detectó que los medicamentos faltantes (leche en polvo, insulina, vitaminas, ácido fólico, entre otros) coincidían con los que se encotraban vencidos en los centros de distribución.

Según informó Ruanova, la gestión de Macri modificó el sistema de compras de  medicamentos. “Se compra un stock grande de medicamentos y se guardan en distintos lugares. Los medicamentos comprados vencieron en los galpones donde el gobierno los stockea y como esto es una licitación y quien se encarga de distribuir es una empresa privada, nosotros investigamos que la empresa le preguntaba al área de salud dónde llevar los medicamentos para que no se venzan porque sino la responsabilidad es de la empresa. El Gobierno de la Ciudad no respondía nada", comentó Ruanova.

En octubre de 2005, el servicio de operación logística para el abastecimiento de insumos y medicamentos a los centros de salud de la ciudad de Buenos Aires fue adjudicado a UPS SCS Argentina.  A cambio de una contraprestación 2,87 por ciento del valor de la mercadería ingresada, la empresa debía "concentrar la recepción, el control y la distribución de los bienes adquiridos, manteniendo un sistema de información actualizado y online" con el Ministerio de Salud.

Ruanova recordó que "en 2008 el propio Gobierno porteño denunció la existencia de medicamentos vencidos por 750 mil pesos y dos años más tarde se quintuplicó ese valor, y no solucionaron la situación".

El legislador consideró que la situación  "es una muestra clara de la ineficiencia y negligencia de la administración macrista y del área de Salud" y  adelantó que le solicitará al ministro de Salud de la Ciudad, Jorge Lemus, que "en carácter voluntario" se presente en la Legislatura "para dar explicaciones sobre esta situación y los mecanismos a tomar en este año" en la distribución de medicamentos.