Entre viernes y sábado se realizaron las primeras pruebas piloto del Puente Transbordador Nicolás Avellaneda, que une La Boca y la Isla Maciel, donde se encuentran las Estaciones de Promoción e Interpretación Ambiental, que brindan información histórica, económica, ambiental y patrimonial sobre la Cuenca Matanza Riachuelo.

Los cruces se realizan los días viernes y sábados, de 10 a 16, cada 30 minutos con una capacidad de 25 personas por viaje. La actividad es gratuita y se suspende en caso de lluvias, vientos intensos o tormenta eléctrica.

Una vez arriba del transbordador, los y las pasajeras pueden acceder a puntos panorámicos para sacar fotos y audioguías con distintas informaciones y datos que enriquecen el recorrido. Del otro lado, vecines y guías de la Isla Maciel organizan circuitos de caminatas para llevar a les interesades a recorrer puntos clave del barrio bonaerense.

El nuevo circuito es un proyecto conjunto de la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, Vialidad Nacional, la Provincia de Buenos Aires, el Municipio de Avellaneda y la Comuna 4 de la Ciudad de Buenos Aires. “Uno de los objetivos que buscamos con esta propuesta es integrar ambas riberas del río. Durante muchos años se consideró al Riachuelo solo como un límite entre distritos y eso tuvo consecuencias negativas en términos ambientales”, destacó el presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella.

"Hoy queremos invitar a pensarlo como el punto central de un paseo turístico sostenible, que además promueva la creación de nuevos empleos verdes, y contribuya al desarrollo local", agregó.

 La Cuenca Matanza-Riachuelo comprende un territorio de más de 2.000 kilómetros cuadrados dentro del Área Metropolitana de Buenos Aires y abarca las jurisdicciones de 14 municipios del Conurbano y la de la Ciudad de Buenos Aires, donde viven casi seis millones de personas.