Volver a ser el que fue
El 9 de julio el Club Bohemios de La Boca cumplió 83 años de su fundación. El aniversario llegó con una nueva comisión directiva que busca salir de la crisis económica y recuperar su histórico protagonismo en el barrio.

Quizás pocas películas argentinas sean tan representativas del 2001 como Luna de Avellaneda. Protagonizada por Ricardo Darín, cuenta la historia de un club de barrio a punto de ser transformado en casino. En una de las escenas finales, los socios debaten si vender -bajo la expectativa de obtener 200 nuevos puestos de trabajo- o resistir. La gran disputa se centra entre la razón económica y la persistencia de los valores no mensurables, como la felicidad, la pertenencia o la amistad: la crisis exigía elegir entre vivir y sobrevivir.
En las últimas décadas, producto del retraimiento del Estado y las consecuentes fisuras en los lazos sociales, los clubes de barrio perdieron centralidad como espacio de socialización. Por ello, la recuperación del club como ámbito de pertenencia y encuentro es una de las preocupaciones de la nueva comisión directiva de Bohemios. “Los testimonios del barrio hablan de Bohemios como un lugar de encuentro, de recreación. Un lugar para la familia, las niñas, los niños y los jóvenes. Esa es la intención. Que el club vuelva a ser un lugar de contención, y fundamentalmente ofrecerles a las nuevas generaciones una idea de futuro”, explica el secretario Luciano Fernández a Sur Capitalino.
La tradición del Bohemios se ancla principalmente en el fútbol: “Son muy conocidos y renombrados –sobre todo por la gente de más de 60 años- los campeonatos que se organizaban en Bohemios. Hay fotos donde las finales eran multitudinarias, centenares de personas viendo los partidos del barrio”, cuenta Fernández. El propio presidente del Club, José María Zallocco, vistió su camiseta en más de una ocasión. Por ello, la renovación de las canchas de futsal y papi es una de las prioridades de la nueva Comisión Directiva. Por eso, la refacción de las instalaciones del club es uno de los principales destinos que les otorgarán a los subsidios que llegarán pronto desde el Programa Clubes de Barrio del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación. Su titular, Matías Lammens, visitó Bohemios semanas atrás y, según Fernández, encontraron en el ex presidente de San Lorenzo una gran receptividad. Algo similar les sucedió con la Fundación Andreani, desde donde también prometieron darle una mano al club.
Es que la situación financiera de Bohemios es crítica. En la actualidad, el club cuenta con una deuda de aproximadamente cinco millones de pesos en servicios. Al respecto, Zalloco sostiene: “Tenemos deudas siderales de luz, gas, agua. Hace un año y medio que estamos cerrados, sin actividad, y nos vienen facturas escandalosas. Nos juntamos con las comisiones de otros clubes para reclamar, pero cuando empecemos con las actividades iremos recaudando fondos. El alquiler de la cancha va a ser importante”.
Mientras tanto, el club se sigue renovando. El 22 de junio se cumplieron 35 años del Gol del Siglo, como se lo conoce al gol de Diego Maradona a los ingleses en los cuartos de final de México 1986. En conmemoración, en Bohemios instalaron una obra del artista plástico Alejandro Marmo. Se trata de una réplica de la obra que le donó al Club Nápoli de Italia, donde jugó Maradona. Fernández comenta: “Nos gustaría trazar un puente simbólico, imaginario, entre La Boca y Nápoles, que son como los dos barrios donde el Diego fue un ídolo popular, más allá que después trascendió a ambos. El punto de conexión es la obra de este artista (que donó al club), y que para nosotros representa el rol social del club. La imagen del Diego está asociada al autoestima: el gol a los ingleses, después de la guerra, después de la dictadura. Diego nos levanta, nos devuelve el amor propio como pueblo. Esa imagen, esa esfinge, es la piedra base de lo que queremos hacer con el club en relación al barrio: recuperar la autoestima y a partir de eso regenerar los lazos solidarios”.
Los clubes de barrio, como Bohemios, son hendijas en las que la razón económica se suspende, y la recreación, la pertenencia, la amistad y ser querido por el otro, cobran valor. Valores intangibles, no mensurables, hasta improductivos, pero que hacen la diferencia entre vivir y sobrevivir.
Clases y talleres
Con cupos limitados y protocolos de cuidado, el Club Bohemios ofrece una serie de clases y talleres como Urbano Dance para menores de 10 años, Taller de Rap con el raper vecino Pedro Peligro, Folklore, Canto, Karate y Full Contact, Zumba y Yoga. La información para inscribirse está en el Instagram del club o acercándose a su sede.
Conectados
Necochea 948, La Boca
Ig @cscydbohemios
Fb @Cscd Bohemios