La demolición ocurrió este miércoles por la tarde, cuando los operarios llevaban adelante un operativo en una de las zonas donde se realizan las obras de urbanización de la Villa 31. 

En declaraciones con radio AM750, se supo que durante el operativo se cometió un error y cedió una losa, por lo que les vecines fueron desalojados del lugar. 

Mientras la Policía y los Bomberos intervenían en el lugar se produjo un cortocircuito que desató un principio de incendio, por motivos que aún son materia de investigación. 

En diálogo con el móvil de AM750, Romina María José Espinoza, una de las vecinas afectadas, contó que debió pasar la noche sentada en el lugar y exigió respuestas urgentes. “Estoy embarazada de ocho meses, yo alquilaba acá y ahora no tenemos nada, no sé si perdí todo, porque no nos dejan pasar a ver”, reclamó. 

 En este contexto, les vecines denuncian que la única oferta del Gobierno de la Ciudad es trasladarlos a paradores, aunque sin garantizar el cuidado de las pertenencias que quedaron en el lugar, bajo los escombros. 

Otra de las vecinas, Analía Dayoso, se preguntaba: “¿Dónde voy a dormir ahora? No tengo otro lugar. No voy a ir con mi hijo a un parador, sabiendo cómo funcionan. Además, mi hijo es asmático. No nos solucionan nada. Yo perdí todo, hay otra señora a la que se le quemó todo. Nos dicen que no saben qué pasó, nadie se hace cargo de nada”. 

Personal del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat se acercaron al lugar recién el jueves, 24 horas después del derrumbe e incendio, para dialogar con sus habitantes, quienes rechazan ser trasladados a paradores para personas en situación de calle y reclaman una solución urgente. 

Fuente: Página 12