Sin clases virtuales y sin canasta escolar

La polémica medida del Gobierno porteño de suspender las clases virtuales durante la semana de confinamiento estricto vino acompañada con la cancelación de la entrega de alimentos en un contexto donde la crisis económica apremia a muchísimas familias.

Sin clases virtuales y sin canasta escolar

Además de afectar la continuidad educativa, la decisión del Gobierno porteño deja sin acceso a la Canasta Escolar Nutritiva a todas las familias.  Incluso el año pasado, durante las distintas etapas de las medidas sanitarias, las escuelas permanecieron siempre abiertas, muchas veces sostenidas por las comunidades educativas, para cumplir con la función social que desempeñan, sobre todo para quienes más lo necesitan.

"Quitarle la comida de la boca a los chicos es otra forma de extorsión a la comunidad educativa y a las familias", dijo Eduardo López, secretario gremial de Ctera y secretario general adjunto de UTE, quien definió el hecho como "una canallada", desde su cuenta de Twitter.

Las cooperadoras de las escuelas porteñas manifestaron su preocupación frente a estas medidas que afectan la continuidad y la calidad de la educación pública. “Todas las semanas vemos cómo avanza el GCBA en su decisión de correr al Estado de sus responsabilidades y obligaciones para construir una Escuela Pública de calidad para todos y todas”, denuncian.

Hace apenas unas semanas, se enteraron por un mail que a partir del mes de junio el Gobierno porteño no enviará más elementos de bioseguridad a las escuelas, delegando la responsabilidad en las familias. Las cooperadoras recibirían un fondo anual, calculado en función de la matrícula de la escuela, para que cada establecimiento se encargue de la compra de los insumos.

Las Cooperadoras de toda la ciudad rechazaron esta resolución y plantearon a las autoridades que sea el Gobierno porteño, a través del Ministerio de Educación, quien garantice las condiciones sanitarias y los elementos de bioseguridad para sostener la presencialidad.

La gestión de las compras es una tarea que implica tiempo y responsabilidad: pedir presupuestos, asegurarse de que los insumos cumplan las normas de calidad, responsabilizarse de la logística y del gasto de los recursos, no puede quedar a cargo de las familias. “Entendemos que excede el rol y la responsabilidad de las Asociaciones Cooperadoras en materia de bioseguridad para el cuidado de las escuelas que se requiere para hacer frente al COVID 19”, expresaron.