Acá sí que hay lugar

El Movimiento Evita abrió en La Boca el Multiespacio Comunitario, un edificio donde funcionan un jardín de primera infancia, un bachillerato popular y una casa de atención a personas que tienen consumos problemáticos. Un granito de arena para dar respuesta en un barrio donde el Estado no la da.

Acá sí que hay lugar

En la avenida Almirante Brown 1127 crece un nuevo espacio que busca poner su granito de arena en la construcción de respuestas a problemáticas que atraviesa el barrio: falta de vacantes para las niñeces más pequeñas, deserción escolar de adolescentes y consumo de sustancias. Es el Multiespacio Comunitario del Movimiento Evita, que abrió sus puertas en octubre pasado y que desde marzo comenzará a funcionar a pleno. El edificio alberga a una de las Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario (CAAC) que dependen del Sedronar, un Espacio de Primera Infancia (EPI) y un Bachillerato Popular. “Como militantes políticos tenemos que estar donde está la necesidad. Y este barrio del sur, en la Comuna 4, es de los más olvidados, es donde menos voluntad política tiene el Gobierno de la Ciudad, donde no hay política de vivienda ni de salud, no hay vacantes en las escuelas. Por eso decidimos abrir este espacio como respuesta a lo que el Estado no da”, explica Lucas Bogado, responsable del Evita en la Comuna 4.

A su lado está Jessica Fajardo, docente del Bachillerato Popular Germán Abdala, una escuela que desde hace 13 años en La Boca brinda la posibilidad a jóvenes y adultes mayores de 18 años de empezar o terminar la secundaria. Poco antes de la pandemia el edificio donde funcionaba el Bachi entró en peligro de derrumbe. “Desde entonces estuvimos peregrinando buscando un lugar, nos prometieron espacios que no nos dieron y ahora, en articulación con el EPI y el CAAC, estamos acá, muy contentes”, dice. El desafío principal es recuperar la cantidad de estudiantes que tenían antes de que el Covid nos cambiara la vida a todes. “Costó muchísimo la pandemia, estuvimos trabajando por WhatsApp con todas las barreras que existen para el acceso. Intentamos armar foros, pero también se dificultaba. Después implementamos los cuadernillos y también dimos contención alimentaria con olla popular. Retomar la presencialidad fue complejo porque muchos empezaron a trabajar en los horarios en los que cursaban”, repasa Jessica con tristeza pero enseguida la esperanza aparece en su sonrisa: “El último tiempo hay un aumento en las mujeres que vienen, percibimos que hay un propósito de muchas madres de terminar el secundario que tuvieron que dejar por hijes o trabajo”. La cursada en el Bachillerato es de lunes a jueves de 18.30 a 21.45 y otorga el título oficial de Perito en desarrollo de las comunidades.

Por la tarde, de 13.30 a 16.30, el espacio de Brown casi Brandsen se llena de niñes. Es el turno del jardín comunitario Juana Azurduy. O el EPI como le dice Luciana Orieta, una de las siete educadoras de la villa 21-24 que acompañan a les chiques de 1 a 3 años con un abordaje pedagógico y lúdico. “El EPI surge de la necesidad de vacantes. Muchas mamás quieren que sus hijes empiecen su educación y no encuentran dónde. Acá las acompañamos respetando la infancia individual, de manera grupal y también con las familias. Además, somos promotoras de género así que, si las mamás lo necesitan, las asistimos por situaciones de violencia”. Luciana explica que otro eje fundamental es la articulación con las áreas de salud del Evita y con les especialistas de Casa Pueblo.

Casa Pueblo es el nombre que el Movimiento les puso a los CAAC que funcionan en los barrios más vulnerados del país como lugares de atención, acompañamiento e inclusión social a personas que atraviesan un consumo problemático de sustancias. La Comuna 4 tiene un enorme déficit de profesionales de la psicología. Los Cesac tienen uno, dos o a veces ninguno para poblaciones tan grandes como necesitadas de atención en salud mental. Adolescentes y jóvenes fueron les más afectades por la pandemia.

“La Boca es uno de los barrios populares del sur de la Ciudad, esto implica que las políticas públicas del Gobierno de la Ciudad no llegan o llegan tarde. Casa Pueblo es una respuesta del campo popular ahí dónde el Estado está ausente”, explica Camila Arrieta, responsable del espacio de La Boca donde, todos los días de 10 a 13, cuentan con psicólogos y psicólogas, pero también brindan músico terapia y talleres que van desde la bachata hasta el yoga, disciplinas que ayudan a la construcción de proyectos de vida en comunidad de quienes atraviesan un consumo.

Comunidad es una palabra que se repite mucho en la charla con les integrantes de los tres espacios. Territorio es otra. La Boca de eso sabe, y mucho. Así que ya saben, el Multiespacio está abierto a quienes busquen acompañamiento, ayuda, apoyos y, por qué no también, construcción y organización popular.

 

Dónde

Multiespacio Comunitario: Av. Almirante Brown 1127, La Boca.

  • Casa Pueblo: Lunes a viernes de 10 a 13hs.
  • EPI Juana Azurduy: Inscripciones del 13 al 28 de febrero de 13.30 a 14.30. Más info por WhatsApp al 11 2525-3708.
  • Bachillerato Popular Germán Abdala: Inscripciones desde el 27 de febrero de 18.30 a 20. El 20 de marzo comienzan las clases.