Diego del pueblo

Ningún pueblo olvida a quien lo hizo feliz. Bostero, villero y peronista. Gracias 10. Los mensajes se multiplican al ritmo de las lágrimas. La puerta de La Bombonera se vuelve santuario de un D10S eterno. Pibes, viejas, el barrio todo se empapa de tristeza. Lloran los balcones de los conventillos destartalados. El suelo y el cielo son los destinos de las miradas que buscan alguna explicación, una desmentida. Diego del pueblo. Diego es pueblo.